AZUL (Un poema de Bernardo Santos)
Nosotros lo llamamos el Sur y sin embargo en Ciudad del Cabo, en Buenos Aires y en Sidney, lo llaman el Norte. ¿Y si le damos la vuelta? ¿Y si ponemos el norte al sur? La verdad es que viajando al oeste se llega siempre al este y con perseverancia siempre al mismo punto.
La tierra, esa finitud que sostiene un viaje infinito, ese espacio caliente, feraz, tumultuoso, a veces volcánico, desaparecido en las televisiones y también ese espacio detenido del hielo eterno (o casi), del blanco de los días que son meses.
Porque ¿dónde está el sur y dónde está el norte si cualquier punto es casi equidistante al centro en este esferoide azul?
Somos la generación privilegiada que pudo verse desde afuera, que fotografió lo que antes otros tan solo dibujaron, intuyeron.
El planeta tierra, esa diminuta inmediatez azul, oblata, femenina, frágil hilo del aire, debilísimo equilibrio del caos, a punto de romperse, a una bomba del no ser, a una deforestación de la hecatombe.
Bernardo Santos. Global y roto. Amargord, 2014 |
Bernardo Santos nació en Vinuesa (Soria) en 1962, aunque reside en Sevilla desde hace más de 40 años. Es especialista en farmacia hospitalaria. Ha publicado, entre otros, los siguientes poemarios: Terraza al infinito, Amor desobediente , Con el paso cambiado, El mismo diferente amor. Sus versos se pueden leer también en revistas como Culturamas, Youkali, La hamaca de lona y Viento Sur. Asimismo, su obra forma parte de varias antologías.
En el siguiente enlace puedes escuchar otro poema de Bernardo Santos, Mercados, al que el Niño de Elche ha puesto voz y música: |