BRINDIS POR BURGOS, SUS PUEBLOS Y MIS AMIGOS

Yo, GLORIA FUERTES, declaro ante los campos llenos de amapolas y algún que otro cardo que desciendo de una madre que nació a la sombra de la Catedral de Burgos, que a los tres años ya sabía leer y después me dio por ser poeta. Levanté hacia las nubes Un Globo, Dos Globos, Tres Globos y millones de Globos para que todo el mundo bebiera al amanecer la belleza del sol y por las noches la vitrina de espuelas de los cielos. Brindo con mi taza de manzanilla dorada por todos los niños y niñas que un día me proclamaron la Reina de la Poesía, y por todos aquellos que me dedicaron calles, plazas, bibliotecas y colegios… Era una cabra loca que me gustaba mucho ir por los pueblos y aldeas y provincias de España. Aquellos que no compraban libros (porque allí no llegaban los libros o el dinero), yo les llevaba mi libro vivo, en mi voz cascada y rota, en mi cuerpo cansado o ágil y contaba y cantaba mis versos sencillamente para hacerme entender…. Y cuando viajaba por Castilla y veía un árbol parecía que veía a alguien de mi familia…. Y ahora vengo a Burgos con alas de otros mundos y me siento tan feliz… Aunque como soy LUCIERNAGA FUERTES

            “Cuando pienso en los muchachos

            Que se desangran dentro del cieno

            Me avergüenzo de vivir caliente

                                   De comer caliente

                                   De ponerme caliente.

            Me avergüenzo de que me gusten los otros.

            Me avergüenzo al ir de caza con los amigos

            (¡Qué manera de estropear la tarde!)

            Y me avergüenzo de ser un libro lujoso de poemas

            Encuadernado en piel de hembra

            Ante tanta hambre.

            Siempre será un gusano literario,

            Por muy Luciérnaga que me llamen.”

Nunca me avergüenzo de venir a Burgos y levantar las copas de los árboles y brindar  por nuestro encuentro hasta que todos nos acostumbremos a ser alegres.

¡Con vosotros estoy en la Gloria!

Autobiografía poética

A los pies de la Catedral de Burgos,
nació mi madre.
A los pies de la Catedral de Madrid,
nació mi padre.
Yo nací a los pies de mi madre
en el centro de España, una tarde.
Mi padre era obrero,
modista mi madre.
Yo quisiera haber sido del circo
y sólo soy esto.
De pequeña,
fui a un reformatorio y a un colegio gratis.
De joven fui al dolor
y en el verano a un Preventorio,
y ahora voy a todas partes.
He tenido lo menos siete amores,
varios jefes malos
y apetito envidiable.
Ahora tengo, dos recordatorios
y un beso, muy de tarde en tarde.

AUTOBIOGRAFÍA POÉTICA

Gloria Fuertes nació en Madrid
a los dos días de edad,
pues fue muy laborioso el parto de mi madre
que si se descuida muere por vivirme.
A los tres años ya sabía leer
y a los seis ya sabía mis labores.
Yo era buena y delgada,
alta y algo enferma.
A los nueve años me pilló un carro
y a los catorce me pilló la guerra;
A los quince se murió mi madre, se fue cuando más falta me hacía.
Aprendí a regatear en las tiendas
y a ir a los pueblos por zanahorias.
Por entonces empecé con los amores,
-no digo nombres-,
gracias a eso, pude sobrellevar
mi juventud de barrio.
Quise ir a la guerra, para pararla,
pero me detuvieron a mitad del camino.
Luego me salió una oficina,
donde trabajo como si fuera tonta,
-pero Dios y el botones saben que no lo soy-.
Escribo por las noches
y voy al campo mucho.
Todos los míos han muerto hace años
y estoy más sola que yo misma.
He publicado versos en todos los calendarios,
escribo en un periódico de niños,
y quiero comprarme a plazos una flor natural
como las que le dan a Pemán algunas veces.